Diagnóstico del mobbing: Situaciones que sí son mobbing y situaciones que no lo son

En su significado original, el termino mobbing se utilizaba para explicar el comportamiento animal en el que varios miembros débiles de una misma especie atacaban a un miembro más fuerte. En la actualidad se utiliza para describir la situación en la que un individuo es sometido a presión psicológica por uno o más miembros del grupo, con la complicidad o silencio del resto. Los expertos opinan que el este tipo de acoso es una de las experiencias más devastadoras que puede sufrir un ser humano en una situación social “normal”.

Para que una situación de acoso pueda ser considerada como mobbing se requiere que sea una conducta consciente, que tenga como objetivo disminuir la estima o las capacidades de la persona en su puesto de trabajo para poder eliminarla del grupo y que se mantenga en el tiempo (al menos seis meses) con una frecuencia de acoso al menos semanal.

Para aclarar aún más el concepto explicaremos a continuación que situaciones pueden calificarse como mobbing y cuáles no:

Sí es mobbing:

Los siguientes comportamientos deben estar dirigidos exclusivamente a la persona afectada para que pueda hablarse de mobbing.

  • Ataques a la víctima con medidas organizacionales: Rechazo a reconocer su valía, trato inferior a los demás, sobrecarga de trabajo o, por el contrario, asignarle tareas de poca valía o dejarle sin trabajo, robar su trabajo, negarle la formación necesaria para realizar su trabajo, cambiar continuamente sus objetivos, ser objeto de procedimientos disciplinarios por causas insignificantes o inventadas…
  • Ataques a la víctima mediante aislamiento social: Ser separado o marginado de sus compañeros, ser humillado o criticado, distorsionar sus palabras o conductas…
  • Ataques a la vida privada: Negarle permisos o vacaciones, recibir burlas sobre su vida privada…
  • Situaciones muy graves: Violencia física ya sea sobre objetos (tirar cosas, dar portazos…) o sobre la propia víctima.

No es mobbing:

  • El rechazo social por el que una persona es ignorada pero no perseguida.
  • El stress generado por trabajar bajo presión o en ambientes muy competitivos.
  • Mantener conflictos con compañeros.
  • Padecer un jefe con personalidad complicada (autoritario, exigente, perfeccionista…)
  • Situaciones conflictivas laborales por diferencia de intereses.
  • Conflictos interpersonales puntuales entre dos individuos del mismo poder.
  • Conflictos laborales en los que esté afectado un grupo de trabajadores.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR